La diócesis de Avellaneda-Lanús se une a la alegría de la recuperación de los restos mortales de Antero Daniel Esquivel, catequista de la comunidad de Virgen de los Trabajadores de Villa Caraza, migrante paraguayo y obrero de la construcción, comprometido en la causa del Evangelio de Jesucristo y de profundo amor a la Virgen de Caacupé, recordado con cariño y admiración, y reconocido por su bondad y compromiso por los más necesitados.

La curia diocesana, junto con la comisión de su memoria, invitan a la celebración del traslado e inhumación de sus restos prevista para el domingo 23 de marzo, a las 10.30, en la parroquia donde enseñaba Catequesis (Oliden 4358, Villa Caraza – Lanús Oeste).

En la víspera del Día de la Memoria, la Verdad y la Justicia se agradecerá por la vida del catequista detenido, desaparecido y asesinado durante la última dictadura militar, en la parroquia emblemática de su compromiso humanitario, su testimonio, su acción misionera y solidaria.

Antero Daniel Esquivel fue un joven paraguayo que llegó a la Argentina en busca de trabajo y se convirtió en un líder comunitario y catequista en Villa Fiorito y Villa Caraza.

Su vida estuvo marcada por la fe y el compromiso social y su desaparición, en 1977, fue un golpe devastador para su familia, sus amigos y su comunidad.

Fue miembro de la Juventud Obrera Católica (JOC) y cofundador del Equipo de Pastoral Paraguayo en Argentina (EPPA).

La identificación de sus restos mortales fue un testimonio de la perseverancia y la lucha por la verdad y la justicia. Su hermana melliza, Genoveva, expresó su alivio y gratitud por poder darle sepultura en la comunidad creyente de su barrio en la que siempre recordaron su testimonio y su entrega.

La Comisión de la Memoria de este testigo de la fe invita a unirse a esta celebración y a rendir homenaje a Antero Daniel Esquivel, a quien definen como “un hermano que dio su vida de fe al servicio a los demás”.